La poesía es una de las tantas caras de la pasión

En la bulimia del corazón, se halla la necesidad de gritar sin métricas ni coberturas, el sencillo hecho de dar la espalda sin remordimiento al tiempo con sus mascaras y artimañas o simplemente besar a la vida en los labios de cualquier cuerpo de paso. El corazón no tiene sentimiento ni descanso, el solo convive y sobrevive entre las mentiras y verdades de los 5 mundos de mi cuerpo. Los empíricos le destruyen, le rehogan, le despiertan, la razón y la conciencia le reforma, le acomodan y calma. Pero la razón siempre fue un alquimista juguetón, mando sobre de piezas sobrantes al portador de esta guerra, que va incorruptamente girando a la espera de caos y las tormentas, de paz y renacimiento. Y cada vuelta para este infame es una receta con firma y sello, de los misterios del interior de su hambre, reguardados en un archivo lleno de sobres bajo el nombre de poesía.

sábado, 24 de septiembre de 2011

En espera…





En espera…




Temo por qué no veo
Un camino que me lleve a roma
Y por más que le doy remo
Esta barca no sale de una coma

No puedo hacerme de jota,
Esta corriente no es la mejor
Y no me favorecen las gotas
Que cuelgan de tu mentón,

Te has vuelto cielo estrellado
Dispersa en uno lienzo negro
Mi vida te busca el lado,
Pero encuentra a tu confundido de ego

Te doy el tiempo que mi esmero te permita
Aunque de seguro es más el que necesitas,
Esperare hasta topar con las ganas el cielo
Al parecer hace rato que levante vuelo,
Más yo te quiero e igual espero.

Aun que no sirva de mucho, te doy mi mano
Por qué sin ser gaucho, lo que siento no es vano.

Por ti, cantaría mientras pinto,
Un verano con todo y brisa,
Cantaría hasta lo que no canto
Con tal de que me dones una de tus sonrisas

Aunque muero por un plus,
No puedo dejar de ser tu amigo
Compartamos el cielo azul
¡Ven! Y charla conmigo.

Deja que mi chistera te brinde un chiste
De esos tonto que te hacen explotar,
Y así dejaremos que las palabras filtren
Todo aquello que no quieres guardar.

Controlare mi temar de nuestro temario,
Más no me obligues a decirlo,
Pues sabes muy bien que soy otario,
Ante tus ojos, como no serlo.

Tendremos pausas como largos hiatos
Que espero te vayan bien,
Si me equivoco, avisa y damos un salto
Siempre podemos cambiar de tren

Más si lo que digo es una equivocación
Embárgame los sin embargos que creía tener
Y aunque no…no quiera, no sé,
Me bajare en la siguiente estación del tren

Y no puedo evitar bajar la frente
Pues un aliento se va de este cuerpo,
Pero siempre me tendrás entre la gente,
Disimulando las caras de tu tiempo.

Que cara más triste tiene la necesidad
Pero sin tus ganas esto no puede pasar
Este vampiro se vuelve tan mortal,
Qué diría que tu olor es el mejor para respirar.

Más esto es el peor de los casos
Y no lo quiero ver llegar,
Te sigo a dos o tres pasos
De un momento que nos pueda acercar

A mí, me come la duda,
Pero igual te quiero ayudar
Por eso empecé esta oda,
Mas mi ego mostro mi temar

Puede que mis palabras sean de oso
Pero es difícil no salirse de los esquemas
Por eso me siento algo odioso
Martillando el mismo tema

Pero no puedo evitar estar a la espera
De que apartes la piedra que me frena,
Que faena más hastía
La que no muestra una salida.

Repasando mis palabras,
Te pido perdón,
Callar de seguro es mejor,
Aunque tú prefieras que me abra.
Ahora espero me perdones…

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